Puedes sobreendeudarte con deudas buenas y malas

Puedes sobreendeudarte con deudas buenas y malas

Crédito General

Autora: Lourdes Hernández

Deuda es pedir prestado dinero. Lo cual es bueno. Se trata de un crédito porque “creyeron en ti”.

El meollo del asunto es para qué usas el dinero.

Si pides un préstamo para gastar, puede ser una deuda mala.

Si lo haces para invertir, es buena.

Al referirnos a “gastar” estamos hablando de aquello que no es indispensable, que es un deseo y no una necesidad. Por ejemplo: joyas, cierta vestimenta, una fiesta.

Invertir es pagar la entrada para una casa, la maestría, un negocio, pero también unas vacaciones programadas, porque te ayudan a descansar, a tomar nuevo impulso y a unir más a la familia.

Es importante evitar el sobreendeudamiento. ¿Cómo?

  • Llevando un registro de ingresos y gastos, ya sea en efectivo, tarjeta, transferencias.
  • Distribuyendo los ingresos así: 50% para gastos básicos, 40% para deudas y gastos no básicos. 10% para ahorrar.
  • Además, hay que conocer cuál es nuestra capacidad de pago, así, antes de contraer una deuda, vemos si habrá dinero disponible para pagarla.

Tanto si es deuda buena o mala, puedes caer en el sobreendeudamiento.

Reconoce las alertas de que tienes demasiadas deudas:

  1. Un primer síntoma es que no duermes tranquilo.
  2. A veces estar atrasado en tus deudas es indisciplina, no sobreendeudamiento. Pero ya es una alerta.
  3. Usas el crédito para todo. Gastos como supermercado con pago diferido, o pago de servicios básicos, con crédito.
  4. Cuando saco un crédito para pagar otros créditos.
  5. Usar los ahorros para pagar deudas.
  6. Dejar de pagar unas deudas para cumplir con otras. Si tienes que decidir cuáles cuentas pagar, es una alerta.
  7. Si te están llamando a cada rato para que pagues tus deudas. Es molestoso, pero es tu responsabilidad.
  8. Solo te alcanza para pagar el mínimo de tu tarjeta de crédito. El mínimo es una facilidad que te da la emisora de la tarjeta, lo cual está bien. Pero hay que ser conscientes de que si pagamos solo el mínimo nos van a cobrar intereses. La deuda va a a seguir allí. Se crea un hueco.

¿Por qué nos sobreendeudamos?

Porque sacamos crédito sin pensar que en el futuro tal vez no tengamos los mismos ingresos que ahora.

Porque invertimos en algo que no resulta.

Porque gastamos mucho con la tarjeta y luego no tenemos con qué pagar.

 

Digamos que ya estás “ahorcado-a”… ¿qué puedes hacer?

  1. ¡¡Para de gastar!!
  2. Haz una lista de todas tus deudas.
  3. Haz un plan de pago realista: cuándo podré pagar y con qué monto cada mes.
  4. Habla con la institución financiera y solicita planes de pago o consolidación de deudas. Enfrenta la situación inmediatamente.
  5. Recupera tu paz y tu tranquilidad.

 

 

¿Necesitas ayuda para ordenar tus finanzas?

¿Necesitas ayuda para ordenar tus finanzas?

General

Autora: Lourdes Hernández

  1. ¿Tienes deudas? ¿Estás pagando intereses de esas deudas?

Si tienes una tarjeta de crédito, tienes deuda.

La primera recomendación es revisar el estado de cuenta de tu tarjeta.

La segunda es pagar a tiempo.

En caso de estar atiborrado de deudas, hay que acercarse a la institución financiera a negociar la deuda. Así paras la mora y mejoras tu historial de crédito.

 

  1. ¿Tienes ahorros?

Revisa hoy tu cuenta del banco. Mucha gente no quiere abrir la aplicación del banco, incluso tiene miedo de revisar sus cuentas.

Guarda en un banco o cooperativa tus primeros ahorros y si ya tienes un fondo importante, no lo arriesgues en ofertas de alto riesgo. Busca asesoría para invertir en certificados de depósito a mediano o largo plazo.

Otra recomendación es no vivir de tus ahorros. Incrementa ese dinero para metas familiares, superiores.

 

  1. ¿Cómo están tus ingresos?

Una forma básica de obtener más ingresos es reducir gastos. Todos podemos hacerlo. Y ese dinero que se obtiene puede destinarse como abono a una deuda o a la tarjeta.

Aumentar los ingresos toma tiempo, pero es casi ilimitado. En cambio, reducir los gastos tiene un tope.

Aumenta tus fuentes de ingreso y/o pide un incremento en tu salario. Si obtienes una maestría -por ejemplo- vas a ganar un poco más de lo que ganas hoy. ¿Sabías que un trabajo físico requiere más tiempo de la persona que uno mental?

Una vez encargué a alguien un trabajo especial y esa persona se negó. Dijo “no es mi oficio”. En vez de aprender algo nuevo que le iba a dar más ingresos, se puso límites.

No nos encasillemos en nuestra profesión.

Es muy importante tener otra fuente de ingresos porque el empleo se puede terminar de un segundo a otro. “El único ingreso seguro es el que tú generas”, dice Valeria Arellano.  Ofrece tus habilidades, un servicio, un producto (que se vende mientras tú duermes), o trabaja extra en tus horas libres, siempre que no descuides a tus hijos.

Depende de ti, de nadie más.

 

  1. ¿Planificas o vives al azar?

Haz tu presupuesto: ingresos y gastos. Ocupa máximo el 30% al pago de deudas, 40% para gastos básicos y necesarios y 10% ahorra. La recomendación es: busca asesoría si no puedes armar tu presupuesto.

 

 

 

 

 

 

Todo sobre crédito

Todo sobre crédito

Crédito General

Autora: Ana María Velasco

El crédito es una herramienta financiera poderosa. Cuando lo usamos con responsabilidad, el crédito puede abrirte puertas para estudiar, emprender, comprar una casa, un auto, y mucho más. Pero si no se maneja bien, también puede generar deudas difíciles de pagar. Por eso, aquí te explicamos TODO lo que debes saber para sacarle el mayor provecho al crédito.

¿Qué es el crédito?

El crédito es un préstamo de dinero que una institución financiera (como un banco, cooperativa o tienda comercial) te otorga con el compromiso de que lo pagarás en el futuro, usualmente con intereses. En otras palabras, es dinero que te adelantan y que luego devuelves en cuotas.

¿Cómo obtener un crédito?

Para obtener crédito necesitas cumplir algunos requisitos básicos: la entidad financiera ya sea banco o cooperativa te va a solicitar tus documentos de identidad, un comprobante de una fuente de ingresos y tener un buen historial crediticio, el cual hablaremos más adelante.
Según esta información, la entidad financiera evaluará si puedes pagar y te asignará un monto de crédito dependiendo de tu capacidad económica.

¿Qué tipos de créditos existen?

Hay varios tipos de créditos, y cada uno sirve para una necesidad diferente:
● Crédito personal: Dinero que puedes usar libremente (para emergencias, vacaciones, etc.). Se paga en cuotas mensuales.
● Crédito educativo: Para financiar tus estudios universitarios o técnicos.
● Crédito automotriz: Para comprar un vehículo. El carro suele quedar como garantía hasta que termines de pagar.
● Crédito hipotecario: Es un préstamo a largo plazo para comprar una casa o departamento.
● Tarjeta de crédito: Te da un cupo que puedes usar para comprar. Lo devuelves al final del mes o en cuotas.

La tarjeta de crédito

La tarjeta de crédito es uno de los tipos de crédito más comunes y accesibles. Funciona como una línea de financiamiento que el banco te asigna para que puedas hacer compras y pagar después.
Es como que te dieran una billetera con dinero prestado, y tú decides cómo y cuándo usarlo. A final de mes, te llega un estado de cuenta con lo que gastaste, y pagas lo que consumiste.

¿Qué puedes hacer con una tarjeta de crédito?

● Comprar en tiendas físicas o en línea.
● Pagar servicios como Netflix, Spotify o la luz.
● Retirar dinero en efectivo (pilas: esto suele tener intereses más altos!).

Ventajas de usar tarjeta de crédito

● Tienes acceso inmediato a dinero, sin necesidad de sacar un préstamo largo.
Puedes comprar en cuotas, muchas veces sin intereses si aprovechas promociones.
● Te ayuda a construir historial crediticio, si pagas puntualmente.
● Algunas te ofrecen beneficios extra, como millas, descuentos o devolución de dinero.
Riesgos de la tarjeta de crédito
● Si solo pagas el mínimo, los intereses pueden ser muy altos.
● Es fácil perder el control si no llevas un registro de tus gastos.
● Si te atrasas, afecta tu historial crediticio y tu deuda crece rápido.

¿Qué es el buró de crédito?

El buró de crédito es una entidad que registra el comportamiento de pago de las personas. Es como un “expediente” que muestra si pagas a tiempo o si te atrasas. Los bancos y tiendas consultan este historial antes de darte un crédito para saber si eres “confiable”.
Ojo: No es malo estar en el buró. ¡Todos los que tenemos un crédito aparecemos ahí! Lo importante es tener un buen historial.

¿Cómo tener un buen historial crediticio?

● Paga a tiempo: Siempre. Aunque sea el mínimo, paga antes de la fecha límite.
● No te sobre endeudes: No uses más crédito del que puedes pagar.
● No dejes de pagar por completo: Si tienes problemas, habla con tu banco para refinanciar.
Revisa tu historial regularmente: Así sabrás cómo te ven las entidades financieras.
Tener un buen historial te abre más oportunidades: mejores tasas de interés, mayores montos de crédito y aprobación más rápida.

¿Y si ya estoy endeudado? ¿Cómo salir de deudas?

1. Organiza tus deudas: Anota cuánto debes, a quién, cuánto pagas cada mes y qué intereses estás pagando.
2. Prioriza: Empieza pagando la deuda con el interés más alto o la más pequeña (método bola de nieve).
3. Negocia: Habla con tus acreedores. Muchos ofrecen planes de refinanciamiento o reducción de cuotas.
4. Deja de usar el crédito mientras pagas: No sigas acumulando deuda.
5. Busca ingresos extra: Cualquier ingreso adicional puede ayudarte a avanzar más rápido.

¿Cómo obtener un crédito? Conoce sobre el comportamiento o carácter de pago

¿Cómo obtener un crédito? Conoce sobre el comportamiento o carácter de pago

Crédito General

El Comportamiento o carácter de pago es la calificación de confiable o creíble que adquiere una persona respecto al cumplimiento de un crédito.

El carácter es la personalidad del solicitante. Tiene que ver con quién eres, cuál es tu edad, a qué te dedicas, tu profesión, grado máximo de estudios, dónde vives, cuánto tiempo has vivido en ese domicilio.

Todo esto ayuda a tener una idea de quién es el solicitante y, por ende, si la institución puede o no depositar confianza para prestarle.

Se pueden utilizar varias herramientas para saber si pueden confiar en ti. Actualmente, los Burós de Crédito son las instituciones autorizadas para entregar la información sobre el historial crediticio de las personas y cuál ha sido tu comportamiento en los últimos tres años.

Otro elemento fundamental es la solicitud de crédito, pues es el primer documento del cual se tiene información directa del solicitante. También, se solicitan comprobantes de domicilio, de ingresos, a qué te dedicas, si pagas arriendo o si vives en una casa propia. Todos estos elementos ayudan a tener una idea general de tu carácter o personalidad como solicitante de un crédito. Por tanto, la solicitud de crédito, al ser el primer contacto con el solicitante, es fundamental.

Una vez que se tiene la solicitud de crédito, las referencias son muy importantes. Se solicitan referencias comerciales y bancarias.

Las referencias comerciales ayudan a saber cómo ha sido tu relación comercial con otra persona, es decir, por qué te prestaron, si has tenido incidencias en el cobro y si has sido puntual en tus pagos.

Las referencias bancarias también ayudan a determinar la relación que tienes con instituciones financieras y la periodicidad de tus pagos y su conducta como deudor.

En fin, el carácter o personalidad ayudará a tener una idea general de quién eres, a qué te dedicas, sí frecuentemente has dejado de pagar tus deudas o si eres un buen cliente. Toda esta información ayudará a tomar decisiones para otorgar o no un crédito, es decir, si te depositan o no la confianza.

La persona ideal, es decir quien es sujeto de crédito tiene la capacidad y tiene carácter de pago.

¿Cómo se resume el carácter de pago de un individuo en un puntaje o score de crédito?

El puntaje o score de crédito que te dan como sujeto de crédito puede ser bajo, razonable, bueno, muy bueno o excepcional. Mientras más cerca estás de 999 eres un mejor cliente. Mientras más cerca estás de cero eres un individuo con poco carácter crediticio.

¿Cómo obtener un crédito? Conoce sobre la capacidad de pago

¿Cómo obtener un crédito? Conoce sobre la capacidad de pago

Crédito General

La capacidad de pago se refiere a la disponibilidad de recursos netos (ingresos menos gastos) para cubrir regularmente la deuda a contraer. Los prestamistas deben determinar si puedes realizar tus pagos con comodidad. Tus ingresos y tu historial de empleo son buenos indicadores de tu capacidad para pagar la deuda pendiente. Es posible que tomen en cuenta la cantidad, la estabilidad y el tipo de ingresos.
Por tanto, un paso fundamental de análisis antes de sacar un crédito es el análisis de tu capacidad de pago – es decir, cuánto tienes disponible para destinar al pago de un crédito. El acreedor (la entidad que te presta el dinero) generalmente hará un análisis de capacidad de pago, pero también es tu responsabilidad realizarlo antes de solicitar un crédito.

El análisis de capacidad de pago depende básicamente de dos factores:

• Ingresos – Primero hay que levantar información sobre los ingresos del hogar. ¿Cuáles son las fuentes de ingresos actualmente en tu hogar? Sueldos, ingresos de un negocio, pensiones, arriendos etc. Hay que tomar en cuenta todas las fuentes de ingreso y sacar un ingreso promedio mensual del hogar. En caso de ser dueño de un negocio o de tener un sueldo que varía de mes en mes, hay que calcular un ingreso promedio. Mientras más conservador seas, mejor.

• Gastos – Después hay que analizar los gastos del hogar. Este paso es el más difícil. Generalmente no se cuenta con información precisa sobre los gastos totales. ¿Por qué? Porque se tienen dos tipos de gastos: gastos fijos o regulares – los gastos que se tienen de mes a mes para efectos de: arriendo o hipoteca; alimentación en la casa; salud; educación, transporte, servicios básicos, entre otros.; y gastos variables – éstos son los gastos que no se planifican anticipadamente, pero que igual cuestan. Para realizar un análisis de capacidad de pago hay que procurar sacar el estimado más preciso posible de los gastos mensuales en promedio en el hogar.

Con el total de ingresos y gastos en la mano se restan los gastos de los ingresos para sacar el ingreso neto del hogar. Se puede ocupar un porcentaje del ingreso neto para el pago de un nuevo crédito. Para determinar qué porcentaje del ingreso neto se puede ocupar hay que analizar muy bien si quedará lo suficiente para cualquier gasto imprevisto o gasto eventual. Como regla, si el pago de deudas ya lleva 40% o más del ingreso promedio mensual del hogar, es muy probable que no se tenga la capacidad de pago para sacar otro crédito.
Adicionalmente, no olvides incluir dentro de tus gastos al ahorro. El ahorro debe ser tu primer gasto mes a mes. Este ahorro te permitirá enfrentar un imprevisto, y conseguir metas financieras. Debe ser al menos el 10% de tu ingreso.

¿Cómo se calcula la capacidad de pago en el caso de un negocio?

En el caso de un negocio el análisis es similar, se deben evaluar los flujos de efectivo. La capacidad de pago indica si tu negocio ha generado algún tipo de flujo, y está relacionada con el volumen de ventas y el historial del negocio. Para este análisis, se pueden ayudar de indicadores financieros que permiten determinar esa capacidad de pago. Podemos hablar de la capacidad de pago a corto plazo, con indicadores de liquidez que permiten determinar cuánto efectivo líquido tienes para poder cubrir la deuda. Sin embargo, hablar de la capacidad de pago implica también analizar la capacidad a largo plazo. Esta capacidad se ve determinada por la tendencia del negocio, es decir, el historial y el comportamiento o carácter de pagos.

El dinero de hoy es más valioso que el dinero de mañana

El dinero de hoy es más valioso que el dinero de mañana

General Planificación y Presupuesto

Autora: Lourdes Hernández

El dinero de hoy existe.

El dinero de mañana no existe porque el mañana es incierto.

Por eso, cuidar y hacer crecer el dinero de hoy es una seguridad para esa época incierta que es nuestro futuro. Lo que ahorras hoy te sirve para cumplir metas mañana.

Hoy podemos guardar, hoy podemos invertir. Nuestro dinero hoy tiene el potencial de ganar y crecer. Entonces también crece tu liderazgo y tu auto-respeto que son fundamentales para la prosperidad tuya y de tu familia.

El valor de tu dinero HOY:

Si compras una casa, verás que las cuotas al principio son altas pero luego van bajando por la inflación, hay un costo de oportunidad y seguramente tú y tu pareja van generando más ingresos.

Si compras un carro, éste se deprecia con los años y solo que sea una herramienta de trabajo, puedes decir que te conviene para tus finanzas.

Las vacaciones, la maestría, la jubilación son metas que traen importantes réditos en el futuro: reducir el estrés y tener más fuentes de ingreso.

El slogan de la Semana Global del Dinero en inglés es un verso: “Think before you follow, wise money tomorrow”, que en español podría sonar a: “No sigas al gasto ignorante, guarda mañana dinero inteligente”.

Para lograr esto:

  1. Tener un pensamiento crítico en el manejo del dinero para tomar buenas decisiones, especialmente en la era digital en que te “entran por los ojos”, con un click, demasiadas cosas y experiencias que no necesitas.
  2. Aprender más sobre finanzas personales y empresariales.
  3. Fijar el enfoque en tus metas, sin distracciones.
  4. Sentirte cada vez más fuerte porque no has caído en la tentación.
Tendencia vs Reflexión – Cómo evitar presiones sociales del momento y más en la era digital

Tendencia vs Reflexión – Cómo evitar presiones sociales del momento y más en la era digital

General Planificación y Presupuesto

Autora: Ana María Velasco

Hoy en día, normalizamos la idea de tenerlo todo. Es más, se ha convertido en una “necesidad” tener lo último en moda, tecnología, belleza y estilo de vida. Todo esto gracias a la era digital y las redes sociales que nos están influenciado a comprar todo. Estas nos hacen caer en las tendencias de moda (las cuales cambian cada vez con más frecuencia) y nos hacen sentir como si necesitamos tener eso de moda para encajar.

Si bien no hay nada de malo en comprarnos cosas que nos gustan y darnos ciertos gustos, el problema surge cuando gastamos todos nuestros ahorros, o incluso dinero que no tenemos, en productos que no necesitamos y que tienen una corta vida útil. En pocos meses, estos artículos dejan de estar de moda, dejan de gustarnos o, peor aún, resultan ser de baja calidad y se vuelven inservibles.

Reflexionar antes de comprar: Pensar en el valor a largo plazo

Cada vez que caemos en la trampa del consumo impulsivo, estamos sacrificando una oportunidad de mejorar nuestro futuro financiero. En lugar de dejarnos llevar por la presión de las tendencias, es clave preguntarnos:

  • ¿Realmente necesito esto o solo lo quiero porque está de moda?
  • ¿Este gasto me acerca o me aleja de mis metas financieras?
  • ¿Cuánto tiempo me costó ganar este dinero y cuánto tiempo me durará este producto?
  • ¿Cuántas veces voy a usar lo que estoy comprando, solamente una vez, una vez cada 2 meses, múltiples veces a la semana?

Alternativas para aprovechar mejor tu dinero

En lugar de gastar en tendencias, existen mejores formas de usar tu dinero que pueden traer beneficios a futuro:

  1. Ahorro para metas concretas: En vez de gastar en algo pasajero, puedes destinar ese dinero a un fondo para viajar, comprar una casa o incluso iniciar un negocio.
  2. Inversión en crecimiento personal: Cursos, libros, capacitaciones o experiencias que te aporten valor a largo plazo pueden ser una mejor inversión que un objeto de moda.
  3. Inversión financiera: Poner tu dinero en fondos de inversión, bonos o incluso bienes raíces puede ayudarte a generar ingresos en el futuro.
  4. Compras inteligentes: Si realmente deseas un artículo, busca alternativas de mejor calidad o que tengan un impacto duradero en tu vida.

Por ejemplo, en vez de comprar ese pantalón con brillos y patrones que está super de moda y lo venden barato por internet, invierte en un jean de calidad, de estilo clásico que te va a durar toda la vida.

Por eso es importante que hoy, antes de comprar y dejarnos influenciar por las tendencias y las redes sociales, paremos y reflexionemos si esa compra va a valer la pena, y si está alineada con tus metas futuras.

Guía para padres para abordar la presión social de los hijos

Guía para padres para abordar la presión social de los hijos

General

La presión social se define como el sentimiento de que uno debe hacer las mismas cosas que otras personas de su edad y grupo social para ser querido o respetado por ellos. Esto puede ser negativo o positivo.

La forma en que los adolescentes son presionados de manera negativa ha cambiado significativamente a lo largo de las décadas. En la era digital, el resultado de la presión social puede tener consecuencias duraderas.

• Los Efectos de las Redes Sociales en la presión social

Las redes sociales inducen la presión social a través de exhibiciones y refuerzos de comportamiento. Luego amplifica la deseabilidad social. Debido a que el cerebro adolescente está en desarrollo activo, es más probable que participen en comportamientos arriesgados de compras, inversiones, publicidad, que pueden haber observado en plataformas de redes sociales.

Cada acción en las redes sociales deja una huella digital sólida. Por ejemplo, el rechazo o los comentarios negativos recibidos por los compañeros pueden ser permanentes. Existe un temor legítimo de que años después, puedan ser juzgados por algo que hicieron o dijeron en línea. Es a través de estas acciones que se les presiona para que se ajusten a sus grupos de pares.

No solo los adolescentes son objeto de presión por parte de sus compañeros, sino que los influenciadores de las redes sociales también pueden empeorar esta presión de grupo. Las firmas de marketing apuntan a los adolescentes debido a lo fácilmente influenciables que son. Las decisiones ahora se ven afectadas principalmente por los influenciadores de las redes sociales. Las personas que comparten sus experiencias personales se han convertido en la técnica publicitaria más efectiva.

Los problemas surgen porque los adolescentes no pueden diferenciar entre opiniones comerciales y personales. Debido a que cada persona con un teléfono inteligente tiene una voz, esto a menudo conduce a comentarios odiosos y ciberacoso. Los adolescentes comienzan a sentir que no pueden cumplir con las expectativas sociales y no pueden enfrentar el rechazo. Como resultado, ceden a la presión social.
Existen muchos enfoques que los padres pueden adoptar para hablar sobre la presión social en las redes sociales. Idealmente, cualquier estrategia debería fomentar la comunicación abierta y brindar apoyo.

A continuación, se presenta una guía para los padres con información para ayudar a sus hijos y hablar con ellos sobre la presión de social.

– Se Accesible: Inicialmente, asegúrate de que sepan que pueden hablar contigo. Nunca desestimes ninguna conversación, escucha sus opiniones, responde a sus preguntas, comparte experiencias personales, evita dar sermones y siempre hazte disponible. Haciendo esto, te asegurarás de que sepan que pueden acudir a ti en cualquier momento y que eres la persona con la que pueden hablar.

– Anima A La Comunicación: Anímalos a cuestionar cualquier cosa que les parezca incorrecta. Los adolescentes a menudo no hablan sobre dilemas morales y pueden sucumbir a la presión social. Cuando los padres pueden animarlos a hablar sobre situaciones que les parecen incorrectas, se llegarán a soluciones para resolver o evitar el problema por completo.

– Presta Atención: Presta atención a los cambios de comportamiento y de ánimo. Los padres necesitan hablar regularmente con sus hijos y comprender qué tipo de contenido están consumiendo. Lo que ven en las redes sociales impacta directamente en su estado de ánimo, comportamiento y acciones. Hazles preguntas sobre el contenido y obtén una comprensión de por qué les gusta. Además, establece reglas y momentos sin pantallas en el hogar.

– Discute Las Consecuencias: La presión de grupo negativa conduce a consecuencias perjudiciales, tanto legal, emocional como financieramente. Los adolescentes que conocen las consecuencias de la presión de grupo tienen más probabilidades de evitar situaciones arriesgadas o de hablar sobre ellas antes de que suceda algo terrible.

• Cómo ayudarles a Enfrentar la Presión Social

Ayudar a los adolescentes a enfrentar la presión de grupo comienza con la educación y enseñándoles cómo usar las redes sociales de manera responsable. Considera lo siguiente:

– Enséñales sobre la autoestima y la asertividad.
– Enséñales sobre las prioridades.
– Ayúdalos a rodearse de las personas adecuadas.
– Desanima y desaprueba comportamientos que involucren acoso, chismes, difusión de rumores y comentarios odiosos.
– Discute sobre lo que es apropiado y seguro compartir en las redes sociales.
– Establece límites claros y limitaciones. Muéstreles cómo evitar que las redes sociales interfieran con el sueño, el estudio, las actividades extracurriculares, los deportes, las comidas y las tareas.
– Supervisa sus cuentas y házles saber que estás revisando sus feeds en redes sociales. Esto crea responsabilidad y desalienta comportamientos riesgosos.

Anímelos siempre a tener contacto cara a cara con amigos y compañeros. Esta forma de interacción social es fundamental y reducirá drásticamente su tiempo dedicado a las redes sociales.

Fuente: https://www.addicted.org/

El Trabajo del Futuro

El Trabajo del Futuro

General

Autora: Ana María Velasco

Cuando pensamos en el mundo laboral, nos imaginamos oficinas, jefes y horarios fijos. Pero, ¿qué pasa si miramos más allá? El trabajo del futuro no solo se trata de avances tecnológicos, sino de cambiar nuestra manera de pensar sobre lo que significa trabajar y cómo administramos nuestras finanzas personales.

El trabajo más allá del dinero

El modelo tradicional de trabajo se basa en la necesidad de generar ingresos. Pero con la llegada de la tecnológica, de nuevas necesidades colectivas y de los cambios socioculturales  podríamos ver un mundo donde trabajar sea más que una necesidad. Por eso, aprender a gestionar el dinero, diversificar ingresos y aprovechar inversiones es clave para una estabilidad financiera sin depender de un empleo tradicional.

Cada vez más personas están convirtiendo sus pasatiempos en fuentes de ingresos. Desde creadores de contenido y ‘gamers’ profesionales hasta artesanos y comunicadores, el concepto de ‘trabajar’ está evolucionando para incluir actividades que antes se consideraban solo entretenimiento. Gracias a la tecnología, las redes sociales y el comercio digital, emprender y generar ingresos haciendo lo que realmente nos apasiona es más accesible que nunca. Como resultado, vemos surgir nuevas empresas y modelos de negocio que nacen de la creatividad, la pasión y la innovación.

Esto nos lleva a una nueva perspectiva sobre el manejo del dinero: administrar ingresos irregulares, aprender sobre impuestos para trabajadores independientes y ahorrar estratégicamente. Si decidimos emprender, es importante saber gestionar nuestras ganancias, saber cuándo y en donde invertirlas, tener un fondo de emergencias, etc. Por ejemplo, un creador de contenido puede recibir pagos de manera inconsistente, lo que lo obliga a diseñar un presupuesto flexible que le permita mantener estabilidad económica. Este nuevo modelo de empleo es más incierto, flexible y desconocido, por eso es importante tener en mente nuestras habilidades financieras y la manera en la que nos relacionamos con el dinero.

Empresas flexibles

El mundo empresarial también está cambiando. Algunas organizaciones han implementado estructuras horizontales donde los empleados toman decisiones en conjunto. Otras han eliminado los horarios fijos, permitiendo a sus trabajadores gestionar su propio tiempo. Además, muchas empresas operan completamente en línea, lo que posibilita que sus colaboradores trabajen desde cualquier parte del mundo, en cualquier zona horaria..

Aunque este modelo de trabajo sea beneficioso para muchos también trae desafíos financieros. La flexibilidad laboral puede significar ingresos variables, lo que requiere una planificación financiera más sólida.  Por ejemplo, un trabajador remoto que recibe pagos en diferentes monedas debe estar atento a las tasas de cambio y posibles comisiones bancarias que afecten sus ingresos. Por eso, para quienes trabajan bajo este esquema, es clave aprender a administrar flujos de efectivo irregulares, crear presupuestos realistas y establecer metas financieras claras. Además, sin la seguridad de un salario fijo, contar con un fondo de emergencia y diversificar fuentes de ingresos se vuelve fundamental. En un mundo donde los contratos fijos están desapareciendo, la educación financiera es más necesaria que nunca.

El futuro podría redefinir lo que significa ‘éxito profesional’. Además de que el mundo está cambiando, el ámbito laboral está evolucionando, también nosotros los trabajadores. Cada vez más personas buscan equilibrio en sus vidas en lugar de una carrera agotadora. En este escenario, tener educación financiera se vuelve indispensable: aprender sobre inversiones, generar múltiples fuentes de ingresos y desarrollar hábitos financieros saludables permitirá alcanzar un éxito que no dependa exclusivamente de un empleo formal.

Pensar fuera de lo común en el mundo laboral no solo nos prepara para el futuro, sino que nos permite explorar nuevas maneras de vivir y prosperar económicamente.

Presupuesto objetivo, metas reales

Presupuesto objetivo, metas reales

General Planificación y Presupuesto

Autora: Lourdes Hernández

En febrero y marzo aterrizamos a la realidad y vemos que nuestro plan subjetivo y soñador de enero tiene que ser revisado.

Marcar prioridades: ¿vamos a viajar este año? ¿O adecuaremos la casa? ¿Compraremos más materia prima para el negocio? ¿O celebramos en grande el cumpleaños de nuestra hija de quince años?

Es momento de tomar las riendas de los planes trazados y de ajustar los presupuestos. Si es necesario hacer reparaciones en la casa, no debemos esperar más porque los daños se irán empeorando. Además, el malestar que genera una fuga de agua, un goteo permanente, un sanitario que ya no funciona, puede acabar con los nervios de los miembros de la familia.

La fiesta de quince años puede ser significativa pero ajustada en cuanto a gastos.

Generar más ingresos con cifra exacta

¿Tenemos espacio en la agenda para trabajar más, para producir más, para vender más? Quizás no tenemos ni un instante libre.

De acuerdo al tiempo en el que necesito el dinero, yo puedo:

  1. Hacer 10 acciones de dinero rápido: pongo la cifra exacta del dinero que necesito. Son US$1000. Me basta con vender sánduches o empanadas a mis familiares, amigos y colegas; dictar talleres; trabajar en Uber; transportar bicicletas en los parques y senderos; y así van surgiendo las ideas.
  2. Un autoempleo: ser freelance. Promocionar mi habilidad, ir armando mi cartera de clientes.
  3. Un negocio estructurado: empiezo con el autoempleo y luego fundo una empresa con estructura, un emprendimiento sólido.

Accionar es la clave, con determinación. No sabotearse, poner manos a la obra.

Proyección de ingresos: ¿cuánto espero ganar este año? El año anterior mis ingresos fueron de US$20.000. Es mejor ser conservador porque puede suceder que mis ventas bajen, que mis inquilinos se vayan, que deje de percibir el alquiler de dos o más meses, que trabaje menos horas -como pasa en diciembre- y gane menos dinero, que no haya bono, etcétera.

Si sube la carga de trabajo por algún proyecto nuevo, o porque soy contador-a y más clientes me buscan por la subida del IVA, por ejemplo, recibiré más ingresos.

Ese excedente debe ser cuidado: debe ir al ahorro o a las metas importantes de la familia.

Las adecuaciones de la casa pueden ser cubiertas con ese dinero extra.

Definir metas chicas, medianas y grandes:

Metas grandes que son la maestría, la casa, el retiro. Toma dos años o más para juntar el dinero.

Las medianas son caminos que nos llevan a las grandes o que no son tan grandes. Por ejemplo, un fondo de emergencias e imprevistos como puede ser el daño del vehículo, si nuestro perro enferma, la penalidad de un cambio de pasajes, el deducible del seguro, un robo, etc.

La mediana toma unos 6 meses en juntar el dinero.

Las metas chicas son un viaje por el interior del país, algo que te toma tres meses de ahorro. Las vacaciones familiares no son superficiales pues ese descanso evita que enfermemos de estrés.

¿Cuál es tu meta anual? La mediana: arreglar el baño, comprar una refrigeradora.

¿Cuál es el cronograma? Ahorro de enero a junio. La obra empieza en julio y se termina en agosto.

Programa tu año: hay meses donde los gastos son variables: los cumpleaños, el mantenimiento del carro, pago de impuestos, el reemplazo de algún empleado que toma vacaciones.

Una prioridad obligatoria de todos los meses es el ahorro. “Mi pago” es el 10% de mi ingreso que se deposita en una cuenta aparte al principio del mes.

Dime tu meta y te diré cuánto tiempo debes ahorrar y cómo:

Universidad de los hijos: 4 años

Jubilación: 10 años

Refrigeradora nueva: 6 meses

Vacaciones de verano en la playa:  3 meses

Vehículo o negocio propio: 2 años

¿Cómo ahorrar?

  1. El ahorro no es lo que sobra, es lo primero que te “pagas”. Guarda el 10% de tus ingresos cada mes.
  2. Practica el ahorro cumpliendo metas chicas. Si no lo planeamos no saldrá o saldrá muy caro. Planear juntos con la familia.
  3. Ten un día sin gastar.
  4. Sigue tu plan de ahorro pasito a pasito, si te cansas, ajústalo.
  5. Festeja la victoria de no haber gastado. Esa es la fuerza para continuar.

Apalancarnos en buenos hábitos

  1. Aprender tecnología para ahorrar tiempo.
  2. Hacer ejercicio. Comer sano. Nuestro cuerpo es nuestro principal motor, si se daña, cuesta caro y se termina el negocio.
  3. Ahorrar agua, apagar luces, no usar el carro.
  4. Meditar es un buen hábito contra el estrés.
  5. Vivir con austeridad. Nos aleja de nuestras metas el gastarnos la plata
  6. Llevar el presupuesto al dedillo.