Autora: Michelle Guerrero
Cada uno de nosotros tenemos diferentes sueños. Para algunos de nosotros, es ser dueño de una casa. Para otros, es asegurarse de dejar a sus hijos un mundo mejor. Y para otros, es comenzar su propio negocio.
¿Quién no quiere ser su propio jefe? Es importante tener en cuenta que administrar una empresa no es nada fácil.
Cuando estás listo para comenzar, es importante hacer todo lo posible para prepararte para el éxito. Cuando conocemos los pasos financieros correctos que debemos tomar antes de comenzar un negocio, nos podemos preparar mejor para los desafíos únicos del espíritu empresarial.
- Conocerme a mí mismo
Así como debes intentar comprender el mercado y la industria en los que deseas ingresar antes de dejar tu trabajo y dedicarte al espíritu empresarial, también es importante comprendernos a nosotros mismos.
¿Por qué iniciar tu propio negocio? ¿Qué metas (personales o financieras) estás tratando de lograr? ¿Qué te parece el éxito? ¿Qué te parece el fracaso? ¿Cuánto riesgo estás dispuesto a soportar mientras trabajas para que tu negocio despegue?
¿Listo para dar el siguiente paso? Un asesor financiero puede enseñarte cómo encajan todas las piezas de tu plan financiero.
Las respuestas a estas preguntas serán diferentes para todos. Al responderlas con sinceridad, puedes implementar un plan que funcione para ti y tu familia.
- Conocer la ley
Antes de comenzar cualquier negocio, es una buena idea comprender las leyes y regulaciones que se aplicarán a tu negocio. ¿Necesitas una licencia o permiso en particular? Las leyes y regulaciones pueden variar, así que no tengas miedo de acudir a la cámara de comercio local o un abogado para obtener orientación.
Además, ¿qué estructura empresarial es la adecuada para tu negocio? Si bien muchas pequeñas empresas son empresas unipersonales, existen otras opciones que pueden ofrecer una serie de beneficios legales y fiscales.
- Construir un fondo de emergencia
Muchas empresas siguen un ciclo en el que la demanda es mayor en determinados momentos y menor en otros. Por ejemplo, un paisajista naturalmente verá más trabajos en el verano que en el invierno, y una tienda de ropa puede vender más mercadería durante las vacaciones. Tener una reserva saludable de efectivo puede ayudarte a superar estos picos y prevenir los tipos de problemas de flujo de efectivo que podrían destruir tu negocio.
¿A cuánto debes apuntar? Si bien para la mayoría de las personas se suele recomendar un gasto de tres a seis meses, es posible que los autónomos y otras personas que trabajen por cuenta propia quieran ahorrar aún más, por ejemplo, nueve meses a un año de gastos, aunque esto, por supuesto, dependerá de tu situación financiera. Si estás casado y tienes una segunda fuente de ingresos, por ejemplo, probablemente puedas tener una menor reserva. Sin embargo, si tu negocio es la principal fuente de ingresos para tu familia, es posible que necesites más.
- Pagar tu deuda
Si bien esto no es un requisito para iniciar un negocio, puede ser una buena idea, porque reducir la cantidad de deuda que debes puede tener una serie de beneficios para tu negocio.
Por ejemplo, si planeas depender de un préstamo comercial u otro tipo de financiamiento para que tu negocio despegue, reducir tus responsabilidades personales puede hacerte ver más atractivo para los prestamistas, aumentando tu probabilidad de recibir financiamiento y tasas de interés más bajas. Además, cuantas menos facturas y obligaciones tengas, más fácil será sobrellevar los tiempos difíciles sin tener que aprovechar tus ahorros.
- Separar tus finanzas
Si bien puede que no sea la parte más importante del funcionamiento de una empresa, la gestión financiera es fundamental para el éxito. Eso significa saber qué dinero ingresa, qué dinero sale y de dónde viene y de dónde va, lo que puede ser difícil si no separas tus finanzas personales de las de tu negocio.
Prepárate para el éxito desde el principio abriendo una cuenta corriente comercial separada. Úsala para recibir pagos y pagar los gastos comerciales que puedas encontrar. Esto te ayudará a comprender exactamente cómo le está yendo a tu negocio y facilitará la presentación de tus impuestos.
- Obtener el seguro adecuado
Desde la cobertura médica, de la vista y dental hasta el seguro por discapacidad y el seguro de vida, es importante tener un plan sobre cómo pagarás estos gastos adicionales.
Más allá de estos gastos, también debes comprender los diferentes tipos de seguros que pueden ayudar a proteger tu negocio e incorporarlos a tu plan.
- Tener un plan de contingencia
Si bien hay pasos que puedes tomar para aumentar tus posibilidades de éxito, el simple hecho es que no puedes predecir el futuro.
Es por eso que todos los emprendedores deben poder responder esta pregunta: si esto no funciona, ¿en qué momento estoy dispuesto a reducir mis pérdidas? Sin una respuesta, es demasiado fácil caer en el hábito de perseguir tus pérdidas.
- Considera trabajar con un planificador financiero
Los asesores y planificadores financieros están capacitados para ayudarte a crear un plan financiero y alcanzar las metas que describes en él. Si tu plan financiero incluye comenzar un negocio, un planificador financiero puede guiarte en el camino para hacerlo realidad, incluidos muchos, si no todos, los pasos anteriores.
Fuente: Northwestern Mutual